Como al final no hemos podido ir a Casino, decidimos aprovechar el día y conocer Sidney.
V0lvemos a bajar al centro en autobús (esta vez si cuela que somos peregrinos) y nos bajamos en Circular Quay (al lado del puerto), vemos lo mismo de la noche anterior pero con la perspectiva de la luz del día.
A pesar de estar en invierno, la temperatura es muy agradable (sobre 18 ºc) y en todas las terrazas tienen calentadores de gas.
V0lvemos a bajar al centro en autobús (esta vez si cuela que somos peregrinos) y nos bajamos en Circular Quay (al lado del puerto), vemos lo mismo de la noche anterior pero con la perspectiva de la luz del día.
A pesar de estar en invierno, la temperatura es muy agradable (sobre 18 ºc) y en todas las terrazas tienen calentadores de gas.
Por cierto nos tomamos una cervecita al pie de la opera por 6$ australianos (3,6 €) o una coca-cola a 3,5 $ australianos (2,1 €). Eso si no ponen tapa.
Impresionante la vista de los Rascacielos en la City.
Y como todo no iba a ser por nuestra cuenta, Michael nos llevó a dar una vueltecita por la tarde hasta Darling Harbour (el segundo puerto de Sidney), para compensar el viaje frustado a Casino. Lo de Darling viene por el apellido de un marino inglés, no tiene nada que ver con el adjetivo "cariñoso".
Como veis en la siguiente foto tienen MONORAIL, además de Metro y trenes.
Para rematar la guinda algunos se atrevieron con la "sangre de Nelson", especialidad de cerveza negra.
Faltan fotos de la cena, donde nos hicimos una carne o un pescadito a la Brasa por 28 $ australianos (15 €), bebida aparte.
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